LOS INICIOS
Este historia empieza en Madrid en unos almacenes, Tirso
Delgado Rubio [1], quincallero (*) ubicado en la Travesía del Fúcar 11, donde
comercializaba “Quincalla al por mayor” a comienzos de los 40. Encontramos facturas de los años 40, con sus productos
normalmente de pasta tales como gafas, peines, etc.
Posteriormente abre fábrica, en la misma zona, declarándose
“Fabricante y venta al por mayor de artículos de celuloide” con Fábrica en Costanilla
de los Desamparados 12 y despacho en Travesía del fúcar 3.
Todos ubicado en el centro de Madrid, en concreto dentro
del triángulo que forman el Paseo del Prado y Ronda de Atocha.
Es a comienzos de los 50, cuando Tirso funda Industria Plásticas Madel, oficialmente registrada en 1955 [2], junto a Eduardo Borsot Molinet y, sin confirmar, pero entendemos que junto también a su hermano Gustavo Delgado. Éste último no aparece nombrado en las referencias que hemos encontrado, pero era habitual que el registro de las patentes estuviese a nombre de ambos. Tirso era el Presidente del Consejo de Administración de la compañía según se manifiesta en la convocatoria recogida en el BOE de Junta del año 1961.
Desde sus orígenes son muy prolíficos en el campo de productos plásticos con un gran catálogo de productos, que también se pone de evidencia en las cerca de 180 patentes solicitadas por los hermanos Delgado Rubio, Gustavo y Tirso, junto a su socio Eduardo Borsot Moliner. En estas patentes nos encontramos una gran variedad de productos plásticos, pero principalmente con foco en juguetes sencillos.
Entre estas patentes nos encontramos también la de una cámara sencilla, que coincide con la americana
Scenex o la Snappy fabricada en Inglaterra con exactamente el mismo diseño. Algo muy habitual en aquella época, bajo el concepto de patente de introducción, que permitía introducir copias de productos diseñados fuera de España.
MADEL
La palabra Madel, que tanto se pronunciaba entre los niños
de los 70-80 cuando pedíamos nuestro Madelman a los Reyes Magos, tiene un origen
sencillo: combinación de MAnufacturas con el apellido de Tirso, DELgado (MA+DEL). Sinceramente, siempre he pensado que
Madelman tenía un origen más complejo, de procedencia anglosajona, incluso más trabajado desde la perspectiva del
marketing. Sorpresas de la Historia.
Como parte de su producción, destaca entre los
coleccionistas su cámara Madel 35, una cámara de pequeñas dimensiones en la que
podemos ver el característico logotipo que más adelante se haría famoso en los Madelman.
Es una bonita y sencilla cámara de plástico, de reducido
tamaño aprox. 7-8 cm de ancho y donde destaca la posición del disparo en la parte inferior del
objetivo. Fue fabricada desde 1949 [8] en diferentes colores: verde, granate, marrón
y negra.
A nivel constructivo, como muchas cámaras de esa época, es una cámara sencilla con una mecánica básica, formada por:
1. Cuerpo central donde se acopla los mecanismos de disparo. Este mecanismo se componía de tres componentes metálicos que formaban el obturador de láminas, sujetos al cuerpo mediante tornillos, junto al muelle que permite el retorno al disparar.
A la izquierda se puede ver la palanca de selección I y P, no confundir con la palanca de disparo habitualmente situada en este punto.
Pero la parte más destacada o diferencial de esta cámara creo que es su botón de disparo, que al contrario que la mayoría no se ubicaba en la parte superior, sino en la zona inferior, localizándose debajo del objetivo cuadrado.
Cuenta con una correa plástica unida por soportes, que permitía su transporte y sujeción. No es habitual encontrar este tipo de sujeción, posiblemente de plástico por el origen de la empresa. Sólo recuerdo otra cámara española, Saeta, con este sistema.
2. Tapa
rectangular del objetivo con el logo MADEL 35 que la identifica. Quizás esta
sea una de las piezas que la caracteriza por si forma rectangular, que poco a
poco ha ido olvidándose en la industria, donde prácticamente el 100% son circulares.
El objetivo indica MADEL f 1:7,7 – 35 mm, aunque me sorprende que la óptica, aunque sencilla, fuese fabricado por Madel, si bien no tengo información en uno u otro sentido.
En la parte inferior, tiene una ranura que permite la salida del mando de disparo que la caracterizaba.
3. 3. Tapa trasera con la parte posterior del visor.
Parece que por problemas económicos y lógicamente por su experiencia y trayectoria en la inyección de plástico, sobre todo en el mundo del juguete, a mediados de los 60 venden Industrias Plásticas MADEL a dos empresarios que se habían conocido en la mili [5]. Por un lado José María Arnau, hijo del fundador de Exin, y al madrileño Francisco Luis Andrés Pascual , que lanzan en el año 1968 el exitoso muñeco que dio nombre y relevancia a esta compañía: el Madelman.
Dentro de los activos de la compañía sus ubicaciones originales se situaban en c/Marcelo Usera 59 (oficina) y C/Amor Hermoso 43 (fábrica) [2] . Con la nueva dirección de la mano de Andrés Campos, hijo de Andrés Pascual, cambian su ubicación nuevamente y empieza a desarrollar su actividad en la calle Tomás Bretón, con dos naves en los números 51 y 53. [5 y 6].
Por tanto,
es posible que la cámara Madel 35 fuese fabricada en las instalaciones de la c/Amor Hermoso en barrio de Usera, ubicación
menos céntrica, que las anteriores de las empresas previas de los hermanos Delgado.
Ya en los años 79-80 es trasladada fuera de Madrid, a San
Martín de la Vega tal como cuenta su último director, José Manuel Torre [5].
Aclarar que el muñeco, se diseña en la nueva Madel desde
Exin, de donde llegaban los moldes para realizar el proceso de inyección de las piezas en Madrid. Por tanto, no es un producto desarrollado por la familia Delgado. Nos encontramos 35
patentes de Industrias Plásticas Madel o Madel SA desde 1960 hasta 1976, la
mayoría relacionada con sus muñecos y juguetes.
La historia del Madelman y su evolución ha sido muy bien documentada, existiendo un amplio colectivo de coleccionistas de este muñeco articulado. En el 2018 una exposición en el Museo Nacional de Antropología recordó a este muñeco con el que miles y miles de niños crearon sus mundos de fantasía con sus Madelman.
Os dejo dos referencias por si queréis ampliar u os pica ese gusanillo, como me ha ocurrido a mi, de niño de fin de siglo XX, al que la palabra Madelman trae grandes recuerdos.
Desafortunadamente, muñecos como los Playmobil, con un coste de producción más barato empujaron a la desaparición de este icónico muñeco, que en buena medida, marcó una generación junto con otros juguetes como el Scalectrix o el Exin castillos.
FINAL
Para concluir y volviendo a los orígenes de Madel y la familia Delgado Rubio, una vez vendida Madel, continuó en el sector con dos nuevas empresas:
Industrias Plásticas Tirso donde continuaron fabricando juguetes de plástico, campo en el que la mayoría de sus patentes se enmarcaban como hemos visto.
Industrias Plásticas Aurora donde abordaron otra perspectiva y uso del plástico, más industrial con colaboraciones como las perchas para el Corte Inglés y casquillos para conexión de cables de telefonía. Como muchas otras fábricas de esos años, por ejemplo las textiles, trabajaban con un modelo de subcontratación o casi de “teletrabajo” de la época, es decir, realizando el montaje final en domicilios familiares, donde muchas veces se compartían esas labores padres, madres e hijos.
Parece que cierran finalmente en 1979 por referencia de una persona que trabajaba para ellos en su domicilio montando sus casquillos para cable telefónico. [7]
(*) Quincalla es un término prácticamente extinguido, se refiere según el diccionario de la RAE a un “Conjunto de objetos de metal, generalmente de escaso valor, como tijeras, dedales, imitaciones de joyas” esta acepción se ha ido extendiendo a objetos de mercería, etc.
FUENTES
[1] Información de la página de compra-venta Todo Colección
[2] Historia de Madel por jett
[3] Oficina de Patentes - Inves
[4] BOE
[5] Entrevista con el director de MADEL
[6] Últimos días de MADEL por jett
[7] Comentario cierre
[8] 1890-1990 Cien años de cámaras españolas, de Gerardo Acereda
