Cámaras Antiguas: La cámara del Museo de Ciencias Naturales de Madrid

El Museo de Ciencias Naturales de Madrid, en plena Castellana madrileña, es todo un clásico de los museos de esta ciudad. Entrar y prácticamente chocar con su espectacular elefante, animales, insectos, dinosaurios, etc. son diversión y cultura durante varias horas para, especialmente, los más pequeños. Es una visita siempre interesante y recomendable para disfrutar con los niños y niñas de la familia, pero ahora tenemos otro motivo más.

Y es que algo no esperado, sobre todo para los aficionados a la fotografía y coleccionismo, nos espera entre sala y sala. En la planta inferior del primer edificio y en una de las vitrinas del pasillo que lleva al Gabinete de Carlos III aparece una pequeña cámara de madera con forma de cubo. ¿Qué hace en este museo esta cámara? La leyenda que le acompaña nos lo aclara rápidamente el motivo y también nos abre alguna duda:

Su historia

Esta cámara es parte del Museo y de la historia de las Ciencias en España como “componente” que fue de la Expedición del Pacífico, misión científica que recorrió América entre los años 1862 a 66 [1] [2][3]. Es parte de la exposición permanente que el museo dedica a esta expedición.

Perteneció a Rafael de Castro [4], fotógrafo de esta expedición y para la cual tomó casi medio millar de fotografías. En este video de 1992 se cuenta la recuperación de los trabajos de esta expedición y las aproximadamente 300 placas que la recuerdan, aunque no se ve ninguna tomada con esta especial cámara.

Pero volvamos a la cámara y a una duda que nos abre unas palabras del cartel “revelado en el interior”. ¿Qué tiene de especial esta, en apariencia, sencilla cámara? ¿A qué se puede referir el cartel? Esta pequeña cámara Dubroni es más que una simple cámara de fotografía, realmente era todo un laboratorio de fotografía. Fue la primera cámara en la que se podría revelar la placa fotográfica en su interior, es decir, podríamos decir el antecesor de las minuteras y ya mucho más adelante de las cámaras instantáneas como las Polaroid. Con esta cámara Dubroni se obtenían pequeñas fotografías circulares.

Otro punto interesante y que sorprendería de esta cámara si se confirma la información de su cartel, es que fuese la primera de la serie de este modelo fabricada por la parisina Dubroni.

Volviendo a su curioso su sistema de funcionamiento y tal como se puede ver en su manual, consultable en la Biblioteca Nacional Francesa [7], su interior esconde un secreto, sencillo a la par que curioso: la cámara en su corazón es realmente un recipiente de vidrio verde o naranja, visible en el primer modelo (foto anterior). Este sistema permitía la introducción de los líquidos durante el proceso y que en contacto con la placa revelaban su contenido. Como se puede ver en su parte superior existe un pequeño orificio que facilitaba la introducción de los líquidos mediante una pipeta.

El proceso

El proceso de manipulación y revelado [6] era el siguiente:

La placa se preparaba y limpiaba con alcohol
Una vez colocada la cámara en el soporte o trípode, se introducía una pantalla de cristal en la parte posterior del recipiente y se enfocaba la cámara.
Se desmonta la cámara del trípode una vez preparada y enfocada.
Se vierte colodión en la placa limpia y se coloca en el espacio circular disponible en la puerta trasera de la cámara.
Con una pipeta se introduce nitrato de plata en el recipiente por la válvula o apertura superior
Así la placa se sensibiliza con el nitrato y ya podemos extraer el producto químico sobrante.
Se coloca nuevamente la cámara sobre su soporte (trípode u otro) y se “dispara” o mejor dicho expone quitando la tapa del objetivo. Recordemos estamos en 186x
Una vez expuesta y capturada la imagen, se introduce el revelador, ácido pirogálico. Podía verse la evolución del revelado bien abriendo la puerta trasera
Y ya para finalizar, la placa se limpia mientras estaba aún en la cámara.

En resumen, la Dubroni era todo un laboratorio de fotografía, con un interior construido en vidrio que nunca hubiese esperado en una cámara. Esta pequeña cámara expuesta en el Museo de Ciencias Naturales de Madrid era pionera en una tecnología que ha marcado el desarrollo posterior de la fotografía con minutera, y ya mucho más adelante, unos cien años después las Polaroid.

En eBay aún nos podemos encontrar kits de esta cámara francesa con todos los productos y artilugios necesarios para este proceso [8]. Parece que se comercializaron tanto kits orientados a la fotografía de salón o interior, como para el campo, que como pueden verse en las fotos contenían todo lo necesario:cámara, trípode, líquidos, pipeta, etc.

La próxima vez que tengas la oportunidad de visitar el Museo de Ciencias Naturales de Madrid, además de los dinosaurios tendrás otro aliciente más para recorrer sus pasillos: ver la que podría ser la primera “minutera” en España.

PD: y después, al Museo de Historia de Madrid